La esperanza de vida en España es una de las más altas del mundo. Esto es lo que revela los datos del Padrón Continuo, INE, en uno de sus últimos informes. Además, en el mismo estudio, se revela que las claves para este crecimiento de la esperanza de vida, se basan en el progreso de las condiciones sanitarias, sociales y económicas.
Otro dato revelador, es que la asistencia de profesionales a mayores a domicilio, también inciden en la calidad de vida de las personas mayores.
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Llegar a viejos, en buenas manos
Como dice en una de sus canciones, el cantautor catalán Joan Manuel Serrat, “quizá llegar a viejo sería todo un progreso, un buen remate, un final con beso…”. Así lo entienden la mayoría de los profesionales que trabajan en la asistencia domiciliarias de mayores en vida. Con la expectativa de vida cada vez más grande, la vejez es una realidad. Una realidad que en muchos casos, puede no ser tan fácil ni para la persona mayor ni para los seres queridos.
Tarde o temprano, la familia se enfrenta a la difícil situación y decisión de cuidar a un pariente anciano, lo que afecta la vida de todas las personas que lo rodean. Es aquí donde surge el primer dilema, ¿es necesario internar a la persona mayor en una residencia para mayores? Aunque es una alternativa, la mayoría de las personas mayores no desean abandonar su casa.
Se sienten pegados a sus pertenencias, sus recuerdos, su entorno, sus afectos. Sienten temor de no sentirse cómodos en un hogar de ancianos, de perder la independencia a la que están acostumbrados. Sin embargo, incluir una cuidadora interna 24 horas. puede facilitar y aligerar esta situación. Estas trabajadoras internas acompañan en todo momento a la persona mayor, y la asisten en situaciones tan cotidianas como vestirse y bañarse, e incluso las acompañan a realizar comprar o visitas a sus médicos.
También en muchos casos tienen un nivel de especialización que pueden responsabilizarse de brindar asistencia médica. Una ventaja clave de las cuidadores de mayores es que cuidan a la persona mayor en el entorno que ésta conoce, que percibe como propio, rodeado de sus afectos y sus pertenencias más queridas. No se sienten expulsadas, “ni arrinconadas en la historia, convertidas en fantasmas con memoria”.
La salud bucal es calidad de vida
Según la Washington Dental Service Foundation, sólo un 75% de los adultos mayores de 60 años tienen una parte de sus dientes originales. Las enfermedades de las encías, los dientes sensibles, la diabetes y la sequedad en la boca son solo algunas de las condiciones que se acentúan en la vejez.
Por eso, es de vital importancia mantener visitas regulares a los profesionales de la salud bucal y contar con un excelente servicio de laboratorio dental, donde se puedan realizar las prótesis o implantes necesarios. Otra de las afecciones que pueden aparecer en las personas mayores es el cáncer oral, en cuya detección temprana es vital la figura del dentista. El tratamiento del cáncer oral en Málaga, puede incluir desde cirugía, radioterapia y quimioterapia.
El cáncer oral tiene cuatro etapas:
- Etapa 1: el tumor mide dos centímetros o meno y no se encuentra propagado a los ganglios linfáticos.
- Etapa 2: el tumor mide entre dos y cuatro centímetros y las células cancerosas no se han diseminado a los ganglios linfáticos.
- Etapa 3: el tumor mide más de cuatro centímetros, y puede o no haberse diseminado a los ganglios linfáticos.
- Etapa 4: los tumores pueden ser de cualquier tamaño y se encuentran diseminados a los tejidos cercanos o a otras partes del cuerpo.
Llegar a viejos no tiene por qué ser una etapa de desolación y tristeza. Con la atención domiciliaria adecuada por parte de terceros y la prevención sanitaria, se podrá hablar siempre de envejecer con dignidad y rodeado de afecto.
