El puré de tomate condimentado es un producto que no puede faltar en tu despensa si quieres darles un toque especial a tus platos. Se trata de un puré de tomate natural, sin conservadores ni colorantes, al que se le añaden especias y hierbas aromáticas que le aportan un sabor único y delicioso.
Contenido
Beneficios nutricionales del puré de tomate condimentado
Además de ser delicioso y versátil, el puré de tomate condimentado también tiene muchos beneficios para tu salud. El tomate es una fuente de licopeno, un antioxidante que protege las células del daño causado por los radicales libres y previene el envejecimiento prematuro. El licopeno también ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares, algunos tipos de cáncer y la degeneración macular.
El puré de tomate condimentado también contiene vitaminas y minerales que contribuyen al buen funcionamiento del organismo. Entre ellos se encuentran la vitamina A, que mejora la visión y la salud de la piel; la vitamina C, que fortalece el sistema inmunológico y favorece la cicatrización de heridas; el potasio, que regula la presión arterial y el equilibrio de líquidos; el hierro, que previene la anemia y transporta el oxígeno a las células; y el calcio, que fortalece los huesos y los dientes.
Versatilidad del puré de tomate en la gastronomía clásica
La versatilidad del puré de tomate condimentado es tanta, que se puede usar en una gran variedad de recetas y platos, tanto tradicionales como innovadores. Aquí te presentamos algunas ideas para que lo pruebes y sorprendas a tu familia y amigos con tus creaciones culinarias.
Salsas a base de puré de tomate condimentado
El puré de tomate condimentado es la base perfecta para preparar salsas para acompañar carnes, pastas, pizzas, nachos, quesadillas y mucho más. Solo tienes que calentar el puré en una cacerola, agregar un poco de agua o caldo si lo deseas, y ajustar la sal y el azúcar a tu gusto. También puedes añadir otros ingredientes como queso, crema, chile, albahaca, orégano, etc. para personalizar tu salsa. Algunas salsas que puedes hacer con el puré de tomate condimentado son:
- Salsa boloñesa, napolitana, barbacoa y ranchera: añade carne molida cocida, zanahoria rallada, cebolla picada y laurel. Para la napolitana será necesario añadir aceitunas negras, alcaparras, anchoas y perejil. Por otro lado, para la barbacoa será esencial el vinagre, salsa inglesa, miel, mostaza y humo líquido. Por último, para la ranchera añade chile verde, cebolla, ajo y cilantro.
Los mejores guisos con puré de tomate
El puré de tomate condimentado también es ideal para preparar guisos de carne, pollo, pescado, verduras, legumbres, etc. Solo tienes que sellar el ingrediente principal en una olla con un poco de aceite, agregar el puré de tomate condimentado y el líquido de tu preferencia (agua, caldo, vino, cerveza, etc.), y dejar cocinar a fuego lento hasta que esté tierno y sabroso. Por la parte de los guisos, se puede hacer los siguientes:
- Estofado de ternera: añade patatas, zanahorias, cebolla, ajo, tomillo y laurel.
- Pollo al chilindrón: añade pimiento rojo, pimiento verde, cebolla, ajo, jamón y pimentón.
- Albóndigas en salsa: añade carne molida, huevo, pan rallado, perejil, ajo, sal y pimienta.
- Lentejas con chorizo: añade lentejas, chorizo, zanahoria, cebolla, ajo, laurel y comino.
Sopas y caldos condimentados con puré de tomate
El puré de tomate condimentado también es una excelente opción para preparar sopas nutritivas y reconfortantes. Solo tienes que mezclar el puré con agua o caldo, y agregar los ingredientes que más te gusten, como verduras, fideos, arroz, queso, crema, etc. Puedes hacer sopas cremosas, licuando el puré con los demás ingredientes, o sopas caldosas, dejando los ingredientes enteros o troceados.
Marinados
El puré de tomate condimentado también es un ingrediente fantástico para marinar carnes, pollo, pescado, tofu, etc. Solo tienes que mezclar el puré con aceite, vinagre, sal, pimienta y las especias que más te gusten, como ajo, cebolla, orégano, tomillo, romero, etc. Luego, cubre el ingrediente que quieras marinar con la mezcla y déjalo reposar en el refrigerador por unas horas o toda la noche. Después, puedes cocinarlo al horno, a la parrilla, al sartén o como prefieras.
