Una vez terminadas las vacaciones de Navidad, la cabeza resetea y después del Blue Monday toca ya planificar las siguientes vacaciones. Para los amantes del esquí en Semana Santa tienen su próxima ventanita por la que asomarse a disfrutar de este maravillosos deporte de nieve.
De hecho, son muchas las personas que prefieren esquiar en Semana Santa que en Navidades, ya que el tiempo tiende a ser mejor, no hace tanto frío y se pueden disfrutar de muchos días soleados, sobre todo, dependiendo de destino.
¿A dónde ir? Pues hay quienes eligen Pirineos, otros que prefieren exprimir bien la semana y hacer un viaje más largo e irse a los Alpes, a los italianos, a los franceses o a los suizos y aprovechar a hacer alguna excursión para conocer los alrededores.
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Granada y Sierra Nevada, uno de los destinos familiares más atractivo
Uno de los destinos preferidos para toda la familia es sin duda alguna Sierra Nevada, ya que además del esquí, se pueden dar opciones culturales para los que no practiquen el deporte y es muy accesible en tren. O, se puede hacer mitad y mitad: un poco de nieve y un poco de ciudad.
Y es que es cierto que aunque la pasión por el esquí puede contagiarse, no todas las personas lo aman por igual y, en familia, siempre habrá quien prefiera esquiar solo un par de días y ocupar el tiempo en otra cosa.
Es por esto, como se adelantaba antes, que Granada se convierte en un destino ideal, tanto para unos como para los otros. Y, si se quiere rizar el rizo y hace buen tiempo, siempre se puede ir a Motril a darse el primer baño de la temporada o ver alguna procesión. La cuadratura del círculo.
Para poder aprovechar bien el tiempo conviene tener el plan de viaje más o menos cerrado para improvisar solo cuando haga falta. Así que, para poder ayudar un poco a trazar ese plan, a continuaciónm recogeremos los lugares más importantes que visitar en Granada y otras actividades para no perder detalle.
- Visitar la Alhambra. Esto es clave sin duda. La Alhambra recibe cada día multitud de turistas, por ello es conveniente hacer la reserva online. Nada de improvisar. Más vale que todo el resto del viaje gire en torno a la Alhambra que pasar por Granada sin verla. Además, la visita lleva tiempo, por lo que es importante elegir un horario en el que consideres que puedes verlo todo con calma, así que cuanto más se aleje de la hora de cierre, mejor. La duración puede ser de dos horas y media o tres horas y merece la pena contratar, al menos, audioguía.
- Perderte por el Albaicín. Es la parte alta, toda adoquinada – por lo que el calzado es importante – y es el origen de toda la ciudad de Granada. Aquí hay rutas muy interesantes en las que se puede ver el paso de la historia. No hay que olvidar asomarse al Mirador de San Nicolás, con unas vistas espectaculares de la Alhambra.
- Recorrer el Paseo de los Tristes junto al río Darro. Este paseo es uno de los más famosos de la ciudad. Se llama así popularmente porque por allí pasaban los cortejos fúnebres camino del cementerio. En los callejeros este paseo se llama oficialmente Paseo Padre Manjón, pero si preguntas a cualquier persona por la calle por el Paseo de los Tristes, sin duda, te indicarán bien.
- Ir a un baño árabe. Pero a un baño árabe de verdad, una huella más de lo que dejó esta civilización en la ciudad de Granada. Como también las teterías, otro lugar donde hacer un alto en el camino para tomar fuerzas.
- Visitar la zona de la zona de la Universidad. Granada concentra mucho turismo, pero también muchos estudiantes por lo que es una ciudad llena de vida y color.
- Hacer una ruta (o varias) de tapas. Granada también es sinónimo de bares, de cervezas y de tapitas. Hay distintas zonas donde ese puede disfrutar de estos manjares, como el mismo Paseo de los Tristes o las zonas aledañas al Ayuntamiento o la Plaza de Toros. ¡Cualquier lugar es bueno!
- Ir al Parque de las Ciencias, uno de los primeros museos interactivos. Además de las exposiciones permanentes, este centro lleno de actividades para todos los públicos plantea otra forma de acercarse al conocimiento.
Estos son algunos de los puntos más importantes de la ciudad de Granada, pero se pueden hacer muchas más cosas, como recorrer los pueblecitos blancos de la Alpujarra o visitar las famosas cuevas que cada verano salen por la televisión. Así que, prepara la maleta con esquís y sin ellos y no te arrepentirás.
